¿Sabías que el Yoga complementa el desarrollo de los niños en todos los niveles?
La práctica regular de Yoga con niños ayuda a desarrollar importantes habilidades intra- e interpersonales en una atmósfera favorable para la evolución personal.
Con técnicas orientadas hacia ellos, los niños juegan, disfrutan y se ríen mientras crean, aprenden y crecen.
La búsqueda continua de paz, equilibrio y armonía los llevará a convertirse, en un futuro, en adultos responsables y a disfrutar de una vida alegre y saludable.
Y cuando necesiten volver a su eje, sabrán qué tienen que hacer para lograrlo. Los beneficios del Yoga les serán útiles a lo largo de toda su vida.
Veamos algunos de los beneficios a nivel físico:
- se ejercita la consciencia corporal
- mejora la coordinación
- desarrolla y tonifica los músculos
- brinda agilidad, flexibilidad y equilibrio
- corrige hábitos posturales
- estimula el funcionamiento de los órganos internos
- permite recuperar energías
- relaja el cuerpo
- promueve el descanso al dormir
Sumado a esto, el Yoga con niños disminuye el estrés y la ansiedad infantil y permite disfrutar, crear, sentir, expresar, crecer y soñar en un espacio de autoconocimiento y enriquecimiento junto con otros compañeros de camino.
A nivel interpersonal, se adquiere autodisciplina, se fomenta el trabajo en equipo y se aprende a escuchar al otro, comunicar lo que pasa internamente, respetar las diferencias y tener empatía. De este modo, los niños crecen de forma consciente, percibiendo y equilibrando el cuerpo, la mente, el espíritu y el corazón.
Los niños pueden empezar a tomar clases de Yoga a partir de los tres años de edad.
En Colibrí – Tejedor de vida, la Prof. Fabiana Santecchia ofrece clases presenciales de Yoga para cada rango etario en diferentes horarios.